Las ventanas son parte esencial de tu casa, ya que ayudan a la adecuada iluminación y la ventilación de los espacios. Por eso, es muy importante realizarles un buen mantenimiento de forma regular que te permita extender su vida útil.
Limpieza de cristales
Existen diversos productos especializados en limpieza de vidrios que puedes aprovechar, pero una alternativa más sencilla es el agua con jabón. Solo rocía con un atomizador sobre el cristal y limpia, adicionalmente puedes utilizar paños suaves para esta tarea así evitarás rayar el vidrio.
Mantenimiento de marcos
Los marcos son la parte estructural que sirve de soporte para los cristales. Similar a los vidrios, puedes limpiar con agua y jabón con paños suaves para no rayar ni remover esmaltes o pintura. Sin embargo, hay que tener ciertas consideraciones según sea el material del que estén hechos:
– PVC: si es blanco, tiende a tornarse amarillento con el tiempo y para esto existen productos especializados, así que debes estar al pendiente.
– Madera: cada cierto tiempo requerirán que se retoque el barniz o la pintura.
– Hierro: también requerirán retoque de barniz o pintura, así como constante revisión para tratar el óxido a tiempo.
– Aluminio: puedes limpiar con pasta de dientes para mantener el brillo por más tiempo.
Cuidado de partes móviles
Las partes móviles son aquellas que permiten que las ventanas se abran y se cierran, algunas de ellas contienen bisagras por lo cual deberás tener cuidado. Generalmente necesitarán engrasado con aceite por lo menos una vez al año para que mantenga su movilidad original y evitar el óxido.
En el caso de las ventanas deslizantes, la buena noticia es que actualmente cuentan con pequeños rodillos plásticos que no necesitan mantenimiento, a menos que por alguna razón se averíen. Si las tuyas son más antiguas, seguramente serán de hierro, por lo que es esencial que limpies la parte inferior para remover el polvo o la tierra y luego engrasar para que puedan moverse sin dificultad.