Reducir el riesgo de un robo o fraude es lo que hace un prevencionista de pérdidas, esto sin duda es una latente en cualquier tipo de establecimiento, sea por sus propios empleados como por sus clientes; y claramente no depende de la dimensión del lugar, por ello hoy vamos a repasar algunos de los consejos más puntuales para salvaguardar tu establecimiento, en esta oportunidad un negocio minorista:
1.- Auditar las prácticas de contratación y formación
Algo que nunca va a pasar de moda es la formación y capacitación de tus empleados, saber qué tienen que hacer llegado el caso de hurto o pérdida es ya algo esencial en todas las empresas y cada vez lo están aplicando más negocios de menor cantidad de empleados.
2.- Establecer políticas claras de prevención de pérdidas
Las reglas mandan, así de simple. Si dentro de tu negocio o establecimiento no has contemplado las políticas de la empresa es momento de hacerlo e incluir conductas éticas y honestas para con el cliente como con la empresa. También fomenta las repercusiones que puede tener incumplir una de estas.
3.- Establece fuertes elementos disuasorios
Incluso si son de “mentira”, has creer a tu empleador como al cliente que está siendo vigilado de forma constante, las herramientas que puedes usar pueden ser: alarmas antirrobo, cámaras de vigilancia, circuito cerrado de televisión, etc.
4.- Conseguir implicación de la plantilla
Haz que tu empleador se involucre con tu empresa, si haces que se sienta participe de ella, ten por seguro que tomará mejores medidas para salvaguardar tu negocio, además de ello también sé honesto con él y comunica las cifras de pérdidas, y compartan objetivos en común para mejorar.
5.-Contratar un responsable de prevención de pérdidas
Si logras los objetivos dichos líneas arriba, puedes sentirte aún más seguro si contratas a alguien especialista en el campo. Un prevencionista se encarga de liderar, conducir y entregar informes detallados sobre un posible robo, mantener a los propietarios informados sobre los problemas clave de seguridad, analiza los datos, realiza auditorias e identifica los planes de acción a tomar. Además de ello promociona y ejecuta las mejores prácticas de seguridad.
6.- Desarrolla prácticas contables estrictas
No solo las pérdidas se centran en el bien material, también se dirigen a la pérdida de dinero en caja. Por ello se debería aplicar la contabilidad de costes que se refiere al método de valoración de inventario menos complicado basado en los costes.
7.- Finalmente mejora la gestión de tu inventario
Ya había hablado de ello líneas arriba, pero es esencial que cuentes con un inventario bien gestionado y controlado, esto te permitirá contabilizar tus artículos y evitar los fraudes inesperados. ¿Cómo puedes lograrlo? Implementa un seguimiento a tus artículos, haz recuentos de inventario de forma periódica, realiza auditorias sorpresa e invierte en una tecnología de control de inventarios.